miércoles, 1 de febrero de 2012

Lo sabes

En este punto es inevitable cruzarme contigo y no puedo hacer mas que esperar que no me veas, o que siquiera me ignores. Pero no, no lo haces. Vienes directo a mi y me saludas, mis amigas me ven con ojos de cómplices y te das cuenta... Demonios! Ambos fingimos no haberlo notado pero tu y yo sabemos que todos los que estábamos allí presentes lo notamos. Saludas a alguien que esta atrás de mi al fin puedo dejar de sonreír y ver con ojos de pistola a mis amigas. Ellas se ríen y tu nos volteas a ver con pena. Sabes que algo tienes que ver pero sigues haciendo como si no supieras de que se trata. De repente, el otro, el que te robo mi corazón, aparece dos pisos arriba y yo no puedo dejar de verlo. No creo que lo notes pero, bueno, en realidad no me importa si me ves mientras me pierdo en él o no. Mientras estoy totalmente concentrada en seguirle la pista por el cuarto piso, no noto cundo entras a tu salón, pero de todas formas, no me interesas más. Y de verdad espero que lo sepas. De repente siento su mirada esmeralda intensamente clavada en mi e intento disimularlo pero antes de que pueda hacer alguna otra cosa mis amigas me distraen y cuando vuelvo a voltear ya no esta allí. Se que me vio y sabe que lo vi. Pero como siempre pasa en la vida, todos pretendemos ser locos que saben menos de lo que en verdad sabemos.

No hay comentarios: