Las paranoias regresan. De nuevo empiezo a imaginar cosas, a ver miradas que no están allí y a huir de ti. Es probable que sea como las muchas otras veces. Que este amor sea solo otra cosa más que mi bizarra mente ha inventado. Es posible que tú ni siquiera sepas mi nombre, ni de mi existencia, ni que me paso las horas perdida en ti. Pero es cierto. De nuevo me ha vuelto a pasar. He vuelto a escribir poemas para ti, a elogiar todos y cada una de las cosas que hay en ti: tus ojos, tu sonrisa, tus brazos, tu actitud. Tu. Sola y simplemente por ti. Todo es por ti. Y es cierto que no se de que parte de ti me he enamorado y quizá sea porque me gustas todo tu. Si, con defectos y todo. Eres perfecto a mis ojos, que ya están cansados de buscar entre un millón de estrellas, un destello de luz que esté apuntando en mi dirección. Y es probable que esto acabe como siempre acaban este tipo de cosas para mí. Pero creo que se vale soñar de vez en cuando y arriesgarse una entre mil veces. Ojala seas es millonésima oportunidad.
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